Galletas Integrales Veganas (Sin Mantequilla, Sin Huevo)
Repostería de Angela: Cómo Hacer Galletas Integrales Veganas Saludables y Deliciosas
Buscando una galleta más saludable, creé esta receta sin mantequilla ni huevo, ¡y resultó sorprendentemente deliciosa! Estas galletas tienen una textura firme y un crujido muy agradable al morder. A mí personalmente me encanta esa sensación, pero si prefieres galletas más suaves o tienes dientes sensibles, puede que te parezcan un poco duras. Esta receta es una opción fantástica para un snack saludable o para disfrutar con una bebida caliente.
Ingredientes Secos- 240g de harina de trigo integral
- 1/2 cucharada de levadura en polvo (polvo de hornear)
- 1/2 cucharadita de bicarbonato de sodio
- Una pizca de sal
Instrucciones de preparación
Step 1
Primero, tamiza la harina de trigo integral, la levadura en polvo, el bicarbonato de sodio y la sal juntos en un bol. Tamizar dos o tres veces ayuda a que los ingredientes secos se aireen y no queden grumos, lo que resulta en galletas más ligeras y crujientes.
Step 2
En otro bol, combina el aceite de coco (que debe estar blando pero no líquido) con el azúcar. Usa un batidor de mano (varillas) para batir enérgicamente durante aproximadamente 1 minuto. Este paso ayuda a disolver el azúcar en el aceite, mejorando la textura y el sabor de las galletas.
Step 3
Continúa batiendo enérgicamente durante al menos otro minuto, hasta que la mezcla se aclare y adquiera una consistencia cremosa. Luego, añade las 3 cucharadas de agua y vuelve a batir rápidamente hasta que todos los ingredientes estén bien integrados y formen una base líquida suave.
Step 4
Agrega gradualmente los ingredientes secos tamizados a la mezcla húmeda. Con una espátula o tus manos, mezcla suavemente hasta que estén justo combinados. Es importante no mezclar en exceso, ya que esto puede hacer que las galletas queden duras. Deja de mezclar tan pronto como ya no veas rastros de harina.
Step 5
Coloca la masa en papel film o una bolsa resellable y aplánala ligeramente. Envuelve bien y refrigera durante aproximadamente 1 hora. Enfriar la masa facilitará mucho el proceso de estirado. Después de refrigerar, deja reposar la masa a temperatura ambiente durante unos 30 minutos para que se ablande un poco y sea manejable, pero sin que se vuelva pegajosa.
Step 6
Sobre una superficie ligeramente enharinada, coloca la masa reposada. Usa un rodillo para presionar firmemente y de manera uniforme, estirando la masa hasta un grosor de 0.5 a 1 cm. Utiliza tus cortadores de galletas favoritos para dar forma a la masa. Asegúrate de que el grosor sea constante para que las galletas se horneen de manera uniforme.
Step 7
Forra una bandeja para hornear con papel de horno o una esterilla de silicona. Coloca cuidadosamente las galletas cortadas sobre la bandeja preparada, dejando algo de espacio entre ellas. Para un toque decorativo y para evitar que se hinchen demasiado, utiliza la punta de un palillo o tenedor para hacer varios pequeños agujeros en la parte superior de cada galleta.
Step 8
Hornea en un horno precalentado a 170°C (340°F) durante 12 a 15 minutos, o hasta que los bordes estén ligeramente dorados. El tiempo de horneado puede variar según tu horno, así que vigílalas. Una vez horneadas, sácalas del horno y deja que las galletas se enfríen completamente sobre una rejilla. Enfriarlas por completo potenciará su textura crujiente.