Gratinado de Berenjena Cremoso con Queso Derretido

Receta de Gratinado de Berenjena Esponjoso con Queso

Gratinado de Berenjena Cremoso con Queso Derretido

¡Este delicioso gratinado de berenjena es la manera perfecta de disfrutar las berenjenas frescas de verano! Repleto de queso derretido y cremoso, y con capas de tierna berenjena, es un plato reconfortante y satisfactorio que sirve tanto como acompañamiento fantástico como plato principal. ¡Prepárate para una explosión de sabor y una textura maravillosamente reconfortante!

Información de la receta

  • Categoría : Cocina occidental
  • Categoría de ingredientes : Verduras
  • Ocasión : Para invitados
  • Método de preparación : A la parrilla / Asado
  • Porciones : 1 porción
  • Tiempo de preparación : En menos de 30 minutos
  • Dificultad : Principiante

Ingredientes Principales

  • 5 berenjenas medianas
  • 1/2 calabacín (opcional, se puede omitir)
  • 300 g de queso mozzarella rallado
  • 1/3 a 1/2 taza de queso Parmigiano-Reggiano (queso Parmesano) rallado

Sazonadores y Otros

  • 2/3 taza de salsa de tomate
  • Sal al gusto
  • Pimienta negra al gusto
  • Un poco de aceite de cocina (se recomienda aceite de oliva)

Instrucciones de preparación

Step 1

Lava bien las berenjenas. Corta los extremos y luego divide cada una en tres partes iguales. Después, corta cada parte en rodajas de aproximadamente 5-7 mm de grosor. Intenta que el grosor sea uniforme para que se cocinen por igual.

Step 1

Step 2

Calienta una sartén sin aceite a fuego medio. Coloca las rodajas de berenjena en la sartén y ásalas hasta que estén doradas por ambos lados. Si lo deseas, puedes rociar un poco de aceite de oliva para darle más sabor. Sazona ligeramente con sal mientras se cocinan.

Step 2

Step 3

La berenjena estará lista cuando se vea ligeramente arrugada y ablandada, lo que indica que ha liberado gran parte de su humedad. Este paso es crucial para obtener un gratinado que no quede aguado.

Step 3

Step 4

Si usas calabacín, córtalo con un grosor similar al de la berenjena (aproximadamente 5-7 mm). Añade un poco de aceite de oliva a la misma sartén y asa las rodajas de calabacín hasta que estén ligeramente doradas por ambos lados. No olvides sazonarlas con una pizca de sal.

Step 4

Step 5

Ralla el queso Parmigiano-Reggiano si aún no lo has hecho. No dudes en ajustar la cantidad según tu preferencia: ¡más queso significa más sabor!

Step 5

Step 6

Prepara un recipiente apto para horno. Extiende una capa fina de salsa de tomate de manera uniforme en el fondo. Esto evita que se pegue y añade una deliciosa capa base.

Step 6

Step 7

¡Comienza a montar las capas! Coloca una capa de rodajas de berenjena asada sobre la salsa de tomate. Luego, espolvorea generosamente una capa de queso mozzarella rallado sobre la berenjena.

Step 7

Step 8

Continúa creando capas en este patrón: berenjena, salsa de tomate y queso mozzarella. Repite estas capas hasta que hayas utilizado todos los ingredientes, formando un gratinado bonito y sustancioso.

Step 8

Step 9

Incorpora las rodajas de calabacín asado entre las capas a medida que las construyes. Esto añade otra dimensión de textura y un dulzor sutil al gratinado.

Step 9

Step 10

Sigue apilando las rodajas de berenjena asada y el queso hasta que se agote toda la berenjena. Asegúrate de que la capa superior esté bien cubierta de queso para obtener un acabado dorado perfecto.

Step 10

Step 11

Hornea en un horno precalentado a 200°C (400°F) durante unos 15-20 minutos, o hasta que la parte superior esté dorada y burbujeante. (Ajusta el tiempo de horneado según tu horno). Para una parte superior extra crujiente, puedes espolvorear un poco de pan rallado sobre el queso antes de hornear, o añadir hojas de albahaca fresca durante el montaje para un toque aromático.

Step 11

Step 12

Una vez fuera del horno, decora con perejil fresco picado para un acabado vibrante. ¡Sirve inmediatamente mientras esté caliente para disfrutar del maravillosamente cremoso y derretido queso!

Step 12



Facebook Twitter Instagram Linkedin Youtube