Les presentamos una armonía perfecta de albóndigas redondas y apetitosas junto con repollitos de Bruselas frescos en un plato blanco inmaculado. Los repollitos se utilizan puramente como decoración, sin ningún condimento aparte, permitiendo que la rica salsa de las albóndigas sea la protagonista. Al mojarlas en la sabrosa salsa, los sabores son verdaderamente excepcionales. Los repollitos que compré esta vez son firmes y maravillosamente dulces. Es fantástico que la col, tan saludable, ahora venga en versiones mini, fáciles de comer y manejar. Su dulzura natural significa que no tienes que pensar demasiado en cómo prepararlas. Estas jugosas mini coliflores son perfectas para cualquier ocasión, desde cenas informales entre semana hasta platos impresionantes para fiestas. ¡Prueba a hacer estas deliciosas albóndigas de col hoy mismo!