Alitas de Pollo Crujientes con Salsa de Soja
Receta casera de alitas de pollo fritas y glaseadas con salsa de soja estilo coreano
¡Un aperitivo que encanta a toda la familia! Aprende a preparar fácilmente en casa alitas de pollo glaseadas con salsa de soja, crujientes por fuera y jugosas por dentro, con un delicioso sabor agridulce. Son tan irresistibles que todos, desde niños hasta adultos, las devorarán. Son perfectas como bocadillo para los niños o como acompañamiento ideal para la cerveza.
Ingredientes para la preparación y marinado de las alitas- 24 alitas de pollo
- 1 taza de leche (suficiente para cubrir las alitas)
- Almidón de patata (la cantidad necesaria para cubrir uniformemente las alitas)
Ingredientes para el delicioso glaseado de soja- 100 ml de agua (1/2 taza)
- 1 trozo de alga kombu (5×5 cm)
- 1 cucharada de salsa de soja
- 1 cucharada de salsa de ostras
- 1 cucharada de azúcar
- 1 cucharada de ajo picado
- 1 cucharada de vino de cocina (como mirin o sake)
- 1 cucharadita de salsa picante
- 100 ml de agua (1/2 taza)
- 1 trozo de alga kombu (5×5 cm)
- 1 cucharada de salsa de soja
- 1 cucharada de salsa de ostras
- 1 cucharada de azúcar
- 1 cucharada de ajo picado
- 1 cucharada de vino de cocina (como mirin o sake)
- 1 cucharadita de salsa picante
Instrucciones de preparación
Step 1
Primero, lava bien las alitas de pollo bajo agua fría corriente para eliminar cualquier impureza. Para eliminar cualquier olor a caza o a pescado, sumerge las alitas lavadas en leche y déjalas reposar durante unos 30 minutos. (Si no tienes suficiente leche, puedes añadir un poco de agua para asegurarte de que las alitas queden cubiertas. Este paso elimina eficazmente el olor característico del pollo).
Step 2
Después de remojar en leche, enjuaga las alitas de pollo nuevamente bajo agua corriente y sécalas completamente con papel de cocina. Secar bien las alitas evita salpicaduras de aceite durante la fritura y asegura un resultado más crujiente.
Step 3
Coloca una cantidad generosa de almidón de patata en una bolsa de plástico grande con cierre hermético. Añade las alitas de pollo secas y cierra la bolsa. Agita la bolsa vigorosamente para asegurar que el almidón de patata cubra uniformemente cada alita con una capa fina, evitando grumos. Deja reposar las alitas durante unos 10 minutos para que el almidón absorba suficiente humedad, lo que hará que el rebozado quede extra crujiente.
Step 4
Vierte aceite de cocina en una sartén profunda, suficiente para freír las alitas, y caliéntalo a la temperatura adecuada (aproximadamente 170-180°C). Agrega con cuidado las alitas cubiertas de almidón y fríe durante unos 9 minutos, o hasta que adquieran un color marrón dorado y estén bien cocidas por dentro. Darlas la vuelta a mitad de la cocción asegura una fritura uniforme.
Step 5
Una vez que las alitas de pollo estén bien fritas, transfiérelas a una rejilla forrada con papel de cocina para escurrir el exceso de aceite. Estas alitas fritas son deliciosas mezcladas inmediatamente con la salsa de soja, pero también puedes mojarlas en salsa de miel y mostaza o tu salsa favorita para un sabor diferente. Las alitas recién fritas son maravillosas por sí solas.
Step 6
Ahora, vamos a preparar el delicioso glaseado de salsa de soja para mezclar con las alitas de pollo fritas. En una cacerola, combina 100 ml de agua (1/2 taza), 1 trozo de alga kombu, 1 cucharada de salsa de soja, 1 cucharada de salsa de ostras, 1 cucharada de azúcar, 1 cucharada de ajo picado, 1 cucharada de vino de cocina y 1 cucharadita de salsa picante. Lleva la mezcla a ebullición a fuego medio-alto y deja que hierva hasta que espese ligeramente. Retira el alga kombu una vez que la salsa comience a hervir.
Step 7
Una vez que la salsa esté lista, apaga el fuego. Añade las alitas de pollo fritas a la cacerola y mézclalas rápidamente. La clave es no mezclar en exceso. Un batido ligero asegura que no todas las alitas queden completamente cubiertas, permitiendo que algunas partes permanezcan extra crujientes para un contraste de texturas delicioso. Este método resulta en una experiencia de alitas de pollo sabrosas y crujientes, reminiscentes de las populares cadenas de pollo frito coreanas. ¡Coloca las alitas de pollo terminadas en un plato y disfruta!