Calamares Fritos Crujientes y Dorados: La Receta Definitiva
¡Domina el Arte de los Calamares Fritos Perfectamente Crujientes y Sin Olor en Casa!
Disfruta de calamares increíblemente crujientes por fuera y tiernos por dentro, hechos fácilmente en tu propia cocina. Con ingredientes sencillos y algunos consejos clave, puedes lograr un resultado delicioso que encantará a todos, sin ningún olor a pescado.
Ingredientes Principales- 1 calamar limpio (congelado o fresco)
- Harina para freír (tempura), cantidad suficiente
- Curry en polvo, una pizca (opcional, para realzar el sabor)
- Ajo picado, un poco (opcional, para eliminar el olor a pescado)
- Aceite de cocina, cantidad suficiente (para freír)
Instrucciones de preparación
Step 1
Prepara el calamar, que puede ser fresco o congelado. Enjuaga ligeramente el calamar bajo el chorro de agua y sécalo completamente con papel de cocina. Retira la cabeza y los tentáculos, utilizando solo el cuerpo para freír.
Step 2
Corta el cuerpo del calamar en trozos del tamaño de un bocado, de aproximadamente 1 a 1.5 cm de ancho. En un bol con el calamar cortado, añade 1 cucharadita de ajo picado (opcional, ayuda a reducir el olor pero se puede omitir si usas calamar muy fresco) y 1 cucharada de harina para freír. Mezcla para cubrir uniformemente el calamar. Esta capa inicial ayuda a que la masa principal se adhiera mejor.
Step 3
En un bol aparte, coloca una cantidad generosa de harina para freír. Añade una pizca de curry en polvo para crear la masa. El curry en polvo no solo añade un sabor sutil y delicioso que elimina la necesidad de sazonar extra, sino que también ayuda a enmascarar cualquier posible olor a pescado. Si no tienes curry en polvo, siéntete libre de omitirlo.
Step 4
Mezcla suavemente la harina para freír y el curry en polvo. Puedes añadir un poco de agua para conseguir una consistencia de masa espesa, pero a menudo la humedad del propio calamar es suficiente. Es mejor mezclar primero y solo añadir agua muy gradualmente si es necesario.
Step 5
Reboza los trozos de calamar preparados en la masa. Con cuidado, sumérgelos en aceite de cocina precalentado a 170-180°C (340-350°F). Fríe en tandas, asegurándote de que los trozos no se peguen entre sí. Revuélvelos suavemente con palillos mientras fríes. Fríe durante unos 2-3 minutos, o hasta que estén dorados y crujientes. Una vez fritos, transfiere los calamares a una rejilla o papel de cocina para escurrir el exceso de aceite, asegurando la máxima frescura.