Recibí recientemente una caja entera de caballa salada y decidí que era el momento perfecto para organizar mi congelador. ¡No eran solo unos pocos pescados, sino una caja entera! Había tanto que tuve que colocarlos con cuidado para que cupieran. Si no estuvieran apilados correctamente, sentía que se caerían cada vez que abriera la puerta, ¡una lucha relatable para muchos cocineros caseros! También recibí una generosa cantidad de bayas de aronia de un propietario de una granja de aronia, lo que me hizo considerar comprar otro congelador. Con esta abundante provisión de caballa salada, puedo disfrutar de un pescado al día durante aproximadamente un mes, lo que significa que no necesitaré comprar ningún otro pescado por un tiempo. Así que, involuntariamente, estoy practicando ‘una caballa al día’. A menudo me encuentro comiendo sola y prefiero platos que puedan prepararse como una comida completa en un solo bol. Hoy, he decidido preparar bols de arroz con caballa para mi menú de comida a solas. ¿Por qué no hacer una comida deliciosa aún más placentera? La caballa salada ya es sabrosa por sí sola, pero transformarla en un bol de arroz ofrece una nueva y deliciosa forma de saborearla.