Gratinado de Rodaballo
Disfruta de la Elegancia de la Cocina Casera Francesa con un Delicioso ‘Gratinado de Rodaballo’
Sumérgete en la irresistible combinación de tierno rodaballo y una cremosa y rica salsa que define este ‘Gratinado de Rodaballo’. Aunque es sorprendentemente fácil de preparar, este plato ofrece un sofisticado sabor de la cocina casera francesa. ¡Eleva tus comidas con este reconfortante y elegante gratinado!
Ingredientes Principales- 100g de filete de rodaballo (nacional, sin espinas ni piel, cortado en trozos)
- 1 patata mediana
- Queso mozzarella rallado, al gusto (¡sé generoso!)
- 1 cucharada de mantequilla (para engrasar el molde y añadir riqueza)
- Ralladura de limón, una pizca (opcional, para un toque de frescura)
Salsa Cremosa- 200ml de nata para cocinar (crema de leche espesa, sin azúcar)
- 2 dientes de ajo, laminados finamente
- 1 cucharadita de sal
- Pizca de pimienta negra
- 200ml de nata para cocinar (crema de leche espesa, sin azúcar)
- 2 dientes de ajo, laminados finamente
- 1 cucharadita de sal
- Pizca de pimienta negra
Instrucciones de preparación
Step 1
Comienza con el ingrediente estrella de nuestro plato: el rodaballo deshuesado y sin piel. Si ya está cortado en trozos manejables, puedes usarlo directamente. Si está congelado, déjalo descongelar completamente a temperatura ambiente. Esto asegura que el pescado se mantenga tierno y no se deshaga durante la cocción.
Step 2
Seca suavemente los filetes de rodaballo descongelados con papel de cocina. Sazona ambos lados generosamente con sal y pimienta. Este paso no solo realza el sabor, sino que también ayuda a reducir cualquier posible olor a pescado.
Step 3
Calienta una sartén a fuego medio-bajo y añade una buena cantidad de aceite. Coloca con cuidado los filetes de rodaballo sazonados en la sartén caliente. Dóralos hasta que estén dorados y ligeramente crujientes por cada lado. Busca un bonito sellado que retenga la humedad.
Step 4
Mientras el rodaballo se dora, preparemos la deliciosa salsa cremosa que hace tan especial a este gratinado. En una cacerola, combina la nata, el ajo laminado finamente, la sal y la pimienta. Llévalo a un hervor suave a fuego bajo.
Step 5
Lava bien la patata, pélala y luego córtala en rodajas muy finas, de aproximadamente 3 mm de grosor. Las patatas cortadas finamente se cocinarán rápida y uniformemente dentro de la salsa cremosa, contribuyendo a una textura deliciosa.
Step 6
Una vez que la salsa cremosa comience a hervir, añade todas las patatas cortadas finamente a la cacerola. Remueve suavemente para cubrir las patatas de manera uniforme con la salsa. Reduce el fuego a bajo y deja cocinar hasta que las patatas estén completamente tiernas al pincharlas con un tenedor. Este cocinado lento permite que las patatas absorban los sabores cremosos.
Step 7
Mientras se cocinan las patatas, prepara tu molde para gratinar. Usa una brocha de repostería o tus dedos para cubrir generosamente el interior del molde con mantequilla. Esto evita que se pegue y añade una sutil capa de riqueza mantecosa al gratinado.
Step 8
Transfiere con cuidado las patatas cocidas y su salsa cremosa al molde para gratinar engrasado con mantequilla. Para un toque extra de indulgencia, coloca pequeños trozos de mantequilla sobre las patatas antes de añadir el rodaballo.
Step 9
Coloca los trozos de rodaballo dorado de forma atractiva sobre las patatas y la salsa. No escatimes en el queso mozzarella: espolvorea una cantidad generosa por encima. A medida que se derrite y burbujea, creará una costra de queso maravillosamente dorada.
Step 10
Introduce el gratinado montado en un horno precalentado a 200°C (390°F). Hornea durante aproximadamente 10 minutos, o hasta que el queso esté derretido, dorado y burbujeante. ¡Sírvelo inmediatamente mientras está bien caliente para la experiencia reconfortante definitiva!
