Guía Completa para Limpiar y Conservar Ostras Frescas
Desde el Lavado de Ostras hasta la Conservación Adecuada: Disfruta al Máximo las Ostras de Temporada
Las ostras están en temporada desde el otoño hasta el invierno, lo que las convierte en un ingrediente muy apreciado por su frescura y delicioso sabor. Especialmente durante los meses fríos, el pensamiento de ostras frescas crudas surge naturalmente. Entre los mariscos, las ostras son populares por su bajo contenido calórico (97 kcal por cada 100g) y mínima cantidad de grasa, lo que las convierte en una adición frecuente a las dietas. Las ostras ofrecen infinitas posibilidades culinarias, transformándose en platos como sopa de ostras, tortitas de ostras, ensalada de ostras crudas y arroz con ostras, lo que las hace verdaderamente versátiles. Sin embargo, las ostras frescas, impregnadas de la esencia del mar, pueden ser difíciles de conservar. Para saborear verdaderamente ostras deliciosas, es esencial una preparación y limpieza meticulosas. Exploremos cómo lavarlas a fondo, libres de conchas e impurezas, y conservarlas con frescura óptima.
Ingredientes Principales- Ostras Frescas
Instrucciones de preparación
Step 1
Uno de los métodos más recomendados para limpiar ostras frescas es utilizando ‘rábano’. Ralle finamente un rábano fresco. Este rábano rallado absorbe eficazmente las impurezas de las ostras, ayudando a un lavado completo y limpio.
Step 2
Agregue el rábano finamente rallado a las ostras y mézclelas suavemente como si estuviera aderezando un plato de verduras. Es importante manipularlas con delicadeza para evitar dañar las ostras. Si bien algunos métodos implican cubrir las ostras con una capa gruesa de rábano rallado, mezclarlas suavemente de esta manera ayuda a que el rábano absorba las impurezas de manera más efectiva.
Step 3
Al mezclar y lavar suavemente las ostras, notará que el rábano rallado se vuelve turbio y oscuro a medida que absorbe las impurezas de las ostras. Enjuague las ostras varias veces bajo agua fría hasta que estén limpias. Este proceso elimina eficazmente las conchas de ostra y otros residuos. Aunque puede requerir más enjuagues que usar sal gruesa, el resultado es una ostra mucho más limpia.
Step 4
Durante el proceso de limpieza, es posible que pequeños trozos de concha de ostra aún estén adheridos a la carne de la ostra. Inspeccione cuidadosamente cada ostra con la mano y retire cualquier fragmento de concha restante. Al comprar ostras, evalúe su estado y elija entre frotarlas suavemente con sal gruesa o lavarlas con rábano rallado, según el método que le resulte más conveniente. Para grandes cantidades de ostras, usar rábano rallado es particularmente útil para ahorrar tiempo y esfuerzo.
Step 5
Si desea conservar sus ostras crudas recién limpiadas durante un período prolongado, la ‘congelación’ es el mejor método. Fraccione las ostras en bolsas resellables según el tamaño de porción deseado. Para evitar que se sequen, agregue una pequeña cantidad de agua a la bolsa antes de congelar. Esto ayuda a mantener su humedad y a conservarlas frescas.