La Guía Definitiva para Preparar Sandía: Desde el Lavado hasta el Almacenamiento para Máxima Frescura
Cómo Lavar, Cortar y Almacenar Sandía Perfectamente
¡La sandía, la fruta por excelencia del verano, es un imprescindible para combatir el calor! Mantén tu refrigerador abastecido con rodajas frescas y refrescantes durante todo el verano. Compartimos nuestros mejores consejos sobre cómo lavar la sandía a fondo, cortarla de forma atractiva y almacenarla eficazmente para mantener su delicioso sabor.
Almacenamiento de Sandía- 1 sandía entera
Instrucciones de preparación
Step 1
Eligiendo la Sandía Perfecta: Comienza seleccionando una sandía con el extremo del tallo pequeño y redondo. Busca una fruta con una cáscara de color verde oscuro con rayas negras bien definidas y una superficie lisa. Estos suelen ser indicadores de un melón maduro y sabroso.
Step 2
Lavado a Fondo: Para asegurarte de que la cáscara esté libre de suciedad o contaminantes, usa un limpiador específico para frutas y una esponja suave y desechable. Frota suavemente toda la superficie de la sandía.
Step 3
Enjuaga Bien: Después de lavar, enjuaga la sandía a fondo bajo el chorro de agua. Asegúrate de que no queden rastros del limpiador, dándole una refrescante ‘ducha’.
Step 4
Seca con Toque: Usa un paño de cocina limpio y seco o toallas de papel para secar completamente la superficie de la sandía lavada. El exceso de humedad puede provocar que se eche a perder o que la sandía se ponga blanda.
Step 5
¡Una Buena Elección!: Has elegido y preparado tu sandía a la perfección. ¡Está lista para ser disfrutada!
Step 6
Cortar en Cuñas: Corta la sandía por la mitad y luego córtala en rodajas en forma de abanico. Esto facilita servirla y comerla.
Step 7
Preparando la Pulpa Dulce para Almacenar: Para la parte más dulce del melón, córtala en trozos largos y manejables. Colócalos ordenadamente en un recipiente hermético. Esto ayuda a conservar la humedad natural del melón.
Step 8
Consejos de Refrigeración: Cubre el recipiente herméticamente con film transparente para crear un buen sellado, luego guárdalo en el refrigerador. La sandía refrigerada es perfecta para un refrigerio refrescante en cualquier momento.
Step 9
Utilizando la Zona de la Corteza: La porción más cercana a la cáscara puede ser menos dulce, pero todavía es perfectamente utilizable. Almacena estas partes por separado en una bolsa de plástico resellable.
Step 10
Doble Bolsa para Congelar: Para las partes de la cáscara, colócalas en una bolsa resellable y luego introduce esa bolsa dentro de otra bolsa resellable (una bolsa doble). Sella bien. Esta capa adicional ayuda a prevenir las quemaduras por congelación y la pérdida de humedad.
Step 11
Delicioso Jugo de Sandía: ¡Estos trozos de sandía congelada son fantásticos para hacer un refrescante jugo de sandía más tarde! Disfruta de tu sandía perfectamente preparada este verano.