Latte de Jengibre Casero: ¡Perfecto para Prevenir Resfriados!
Receta detallada para hacer sirope de jengibre y delicioso latte de jengibre en casa
Enfréntate al clima cambiante y al frío del invierno con este sirope de jengibre casero, un poderoso aliado para la prevención de resfriados. Te guiaremos en la preparación del sirope y luego en cómo transformarlo en un delicioso latte de jengibre, una alternativa sabrosa y reconfortante al café.
Para el Sirope de Jengibre- 1 kg de Jengibre Fresco
- 500 g de Azúcar Blanco
- 300 g de Miel
- 1 Rama de Canela
Para el Latte de Jengibre- 2 cucharaditas de Sirope de Jengibre Casero
- 1/2 Taza (120 ml) de Leche
- Una pizca de Canela en Polvo (al gusto)
- 2 cucharaditas de Sirope de Jengibre Casero
- 1/2 Taza (120 ml) de Leche
- Una pizca de Canela en Polvo (al gusto)
Instrucciones de preparación
Step 1
Comienza lavando bien el jengibre. Rómpelo en trozos manejables y sumérgelos en agua para facilitar el pelado. Usa una cuchara o un cuchillo pequeño para raspar suavemente la piel; el jengibre fresco se pela con bastante facilidad. Este paso asegura que tengas jengibre limpio listo para procesar.
Step 2
Después de pelar, enjuaga el jengibre 2-3 veces bajo agua fría corriente para eliminar cualquier residuo de tierra. Escurre bien el jengibre. No te preocupes si quedan pequeños trozos de piel; estos se pueden procesar con el resto del jengibre al extraer el jugo. El objetivo es quitar la mayor parte de la piel sin esfuerzo excesivo.
Step 3
Coloca el jengibre pelado en una licuadora de prensado en frío (extractor de jugos) para obtener todo el jugo de jengibre fresco. Si no tienes un extractor de jugos, puedes licuar el jengibre en un procesador de alimentos o licuadora con un poco de agua hasta que esté suave, luego cuela el líquido a través de un colador de malla fina o una gasa. Alternativamente, ralla finamente el jengibre usando un rallador microplane o uno tradicional.
Step 4
Vierte el jugo de jengibre extraído en un recipiente y déjalo reposar sin mover durante aproximadamente 2 horas. Esto permite que el sedimento almidonado se asiente en el fondo, lo que ayuda a eliminar el amargor natural del jengibre.
Step 5
¡El residuo almidonado que se ha asentado es valioso! Extiéndelo finamente sobre una bandeja para hornear o papel de horno y congélalo. Una vez congelado, podrás romperlo fácilmente. Este polvo de jengibre seco se puede usar más tarde para añadir sabor a platos de pescado o kimchi.
Step 6
Prepara tus frascos de vidrio para el sirope de jengibre esterilizándolos en agua hirviendo desde el principio. Asegúrate de que estén completamente secos antes de llenarlos. Esto es crucial para una correcta conservación.
Step 7
Una vez que el almidón se haya asentado en el jugo de jengibre, vierte cuidadosamente el líquido claro de la parte superior, descartando el almidón asentado. Puedes presionar suavemente el almidón restante para extraer un poco más de jugo si lo deseas antes de desecharlo.
Step 8
En una olla, combina el jugo de jengibre claro y el azúcar blanco. Lleva la mezcla a ebullición, luego retira con una espumadera cualquier espuma que suba a la superficie. Añade la miel y la rama de canela. Tapa la olla y deja que hierva a fuego lento durante 2 horas a fuego muy bajo. Retirar la espuma evita que hierva en exceso y asegura un sirope más limpio.
Step 9
Después de cocinar a fuego lento durante 2 horas, el sirope de jengibre habrá espesado considerablemente. Retira la rama de canela, ya que su propósito principal era infusionar sabor. Con cuidado, vierte el sirope de jengibre caliente en los frascos de vidrio esterilizados.
Step 10
*Esta receta produce aproximadamente dos frascos de delicioso sirope de jengibre casero. Ahora, ¡vamos a usar este maravilloso sirope para crear un reconfortante y dulce latte de jengibre!
Step 11
Calienta la leche en el microondas durante unos 2 minutos hasta que esté bien caliente. Vierte la leche caliente en una taza. Añade 2 cucharaditas del sirope de jengibre casero y mezcla bien para combinar. Para un toque extra de calidez y aroma, espolvorea un poco de canela en polvo por encima. ¡Tu nutritivo latte de jengibre está listo para disfrutar!
