Muffins de Crema de Queso y Arándanos
¡La cremosa y suave crema de queso se une a los refrescantes arándanos en una explosión de sabor! Disfruta de estos deliciosos muffins hechos en casa.

Estos muffins son una deliciosa combinación de la acidez de los arándanos y la suavidad de la crema de queso. Son un bocadillo perfecto para los niños o un regalo casero lleno de cariño. ¡Descubre esta irresistible receta!
Ingredientes para la Masa de Muffins- 150g de mantequilla sin sal, a temperatura ambiente
- 300g de queso crema
- 6 huevos grandes
- 200g de azúcar granulada
- 360g de harina de repostería (o harina todo uso)
- 6g de polvo de hornear (levadura química)
- 1 taza colmada de arándanos congelados (sin descongelar)
Instrucciones de preparación
Step 1
Primero, mide 150g de mantequilla sin sal y 300g de queso crema. Asegúrate de que la mantequilla esté a temperatura ambiente para que esté blanda y sea fácil de cremar. Este paso es clave para obtener una masa suave.

Step 2
En un bol grande, coloca la mantequilla ablandada y el queso crema. Usa una batidora eléctrica a velocidad media y bate durante aproximadamente 1-2 minutos hasta que la mezcla esté ligera, esponjosa y bien combinada. Busca una consistencia suave y cremosa, sin grumos.

Step 3
Agrega gradualmente los 200g de azúcar granulada a la mezcla de mantequilla y queso crema. Es mejor añadir el azúcar en tres partes, mezclando bien después de cada adición. Continúa batiendo con la batidora hasta que la mezcla esté ligera y aireada.

Step 4
Ahora es el momento de añadir los huevos. No añadas los 6 huevos a la vez, ya que esto puede hacer que la mezcla se corte. En su lugar, añade los huevos uno por uno, batiendo bien después de cada adición hasta que estén completamente incorporados. Raspa los lados del bol según sea necesario para asegurar que todo se mezcle uniformemente. Si la masa parece separada, bátela un poco más hasta que se restablezca.

Step 5
Una vez que todos los huevos estén incorporados y la masa esté suave, tamiza los 360g de harina de repostería y los 6g de polvo de hornear directamente sobre los ingredientes húmedos. Con una espátula o un batidor de mano, incorpora suavemente los ingredientes secos a los húmedos hasta que estén justo combinados. Ten cuidado de no mezclar en exceso, ya que esto puede dar lugar a muffins duros. Deja de mezclar tan pronto como ya no veas vetas de harina.

Step 6
Finalmente, incorpora suavemente los arándanos congelados. Para un sabor intenso a arándanos, ¡no seas tímido! Yo añadí una cantidad generosa y los usé directamente del congelador sin descongelar, lo que ayuda a que mantengan mejor su forma durante el horneado. Ajusta la cantidad según tu preferencia.

Step 7
Prepara tu molde para muffins forrándolo con capacillos de papel. Llena cada capacillo aproximadamente al 80% de su capacidad con la masa. Si los llenas demasiado, los muffins podrían desbordarse, mientras que si los llenas poco, pueden quedar más planos. (Aprendí esto de la manera difícil: llenar solo al 60% resultó en tapas menos pronunciadas, ¡así que la próxima vez apunto al 80%!). Puedes presionar algunos arándanos adicionales en la parte superior para decorar si lo deseas, especialmente si quieres atraer a los más pequeños.

Step 8
Precalienta tu horno a 185°C (365°F). Hornea los muffins durante aproximadamente 25 minutos, o hasta que estén dorados y al insertar un palillo en el centro, este salga limpio. Los tiempos de horneado pueden variar ligeramente según tu horno.

Step 9
Si no tienes un molde para muffins estándar, ¡no te preocupes! Puedes usar moldes desechables de papel de aluminio para muffins, que a menudo se encuentran en los supermercados. Simplemente forra estos moldes con capacillos de papel y llénalos con la masa. Estos moldes son reutilizables y una excelente alternativa para hornear muffins.

Step 10
¡Ding! Tus deliciosos Muffins de Crema de Queso y Arándanos están listos para disfrutar. El cálido y acogedor aroma de los muffins recién horneados llenando tu hogar es realmente maravilloso. Están deliciosos servidos calientes, pero también son geniales una vez que se han enfriado.




