Tiernas Muslos de Pollo al Horno
¡Muslos de Pollo al Horno Perfectos y Deliciosos!
Estos muslos de pollo al horno son increíblemente tiernos y jugosos, lo que los convierte en un snack fantástico para los niños o un acompañamiento delicioso para una cerveza fría. Disfruta de una delicia casera que es saludable y satisfactoria.
Ingredientes Principales- 4 muslos de pollo
- 1 taza de leche
- 1 hoja de laurel
Sazonador- Sal al gusto
- Pimienta al gusto
- Sal al gusto
- Pimienta al gusto
Instrucciones de preparación
Step 1
Comienza lavando bien los muslos de pollo bajo agua fría corriente. Coloca los muslos lavados en un bol. Vierte aproximadamente 1 taza de leche sobre ellos y añade 1 hoja de laurel. Para ayudar a que el adobo penetre y ablande más la carne, puedes hacer unos cortes superficiales en los muslos con un cuchillo. Cuanto más tiempo reposen los muslos en la leche, más tierna será la carne. Deja reposar al menos 30 minutos, o incluso toda la noche en el refrigerador para una máxima ternura. Recuerda voltear los muslos ocasionalmente para asegurar que queden uniformemente cubiertos por la leche.
Step 2
Después de remojar, escurre los muslos de la leche y enjuágalos ligeramente bajo agua corriente para eliminar cualquier residuo de leche. Sécalos completamente con toallas de papel. Asegurarse de que los muslos estén completamente secos es crucial para lograr una piel crujiente. Una vez secos, sazona generosamente con sal y pimienta, frotándola por todos los muslos. Para un sabor aún mejor, cubre el bol con film transparente y deja que los muslos se marinen en el refrigerador durante otros 30 minutos.
Step 3
Precalienta tu horno a 200°C (400°F). Cubre una bandeja para hornear o una fuente apta para horno con papel pergamino. Coloca los muslos de pollo sazonados en la bandeja preparada, asegurándote de que el lado de la piel quede hacia arriba. Deja algo de espacio entre cada muslo para permitir una cocción y un dorado uniformes.
Step 4
Introduce los muslos en el horno precalentado y hornea durante aproximadamente 40 minutos a 200°C (400°F). Para asegurar un dorado y una textura crujiente uniformes, voltea los muslos a la mitad del tiempo de horneado, alrededor de los 20 minutos. Puedes comprobar si están listos perforando la parte más gruesa de un muslo con un pincho o tenedor; si los jugos salen claros, están listos. Si prefieres la piel extra crujiente, puedes aumentar ligeramente el tiempo de horneado o usar la función de grill (broiler) durante los últimos minutos, vigilando cuidadosamente para evitar que se quemen.