Crujientes y Dulces Almendras Garrapiñadas con Miel
¡Explosión de Sabor! Receta Fácil de Almendras Garrapiñadas Caseras con Miel
Estas almendras garrapiñadas con miel son el snack perfecto para acompañar tu cerveza o un delicioso gusto para los niños. La irresistible combinación de miel dulce y almendras tostadas crea una textura crujiente por fuera y ligeramente masticable por dentro. ¡Son sorprendentemente fáciles de hacer en casa!
Ingredientes
- Almendras 150g
- Agua 2 cucharadas (aprox. 30ml)
- Miel 2 cucharadas (aprox. 30ml)
- Aceite de canola 2 cucharadas (aprox. 30ml)
- Azúcar moreno 20g
Instrucciones de preparación
Step 1
Lo primero y más importante es tostar las almendras para potenciar su sabor a nuez. Si tienes horno, precaliéntalo a 160°C (320°F) y tuesta las almendras durante unos 5-7 minutos, hasta que estén ligeramente doradas y fragantes. Si no tienes horno, usa una sartén seca a fuego medio-bajo. Tuesta las almendras, removiendo constantemente para que no se quemen, hasta que desprendan un delicioso aroma a nuez y su color se intensifique. Esto suele tardar unos 5-7 minutos.
Step 2
Una vez tostadas, aparta las almendras en un bol. Ahora, prepararemos el delicioso almíbar. Los ingredientes básicos para el almíbar serán agua, aceite de canola (o cualquier aceite vegetal neutro) y, por supuesto, miel para darle dulzor. En la misma sartén que usaste para tostar (o en una limpia), combina 2 cucharadas de agua, 2 cucharadas de aceite de canola y 2 cucharadas de miel.
Step 3
Coloca la sartén a fuego medio y lleva la mezcla del almíbar a ebullición. Una vez que empiece a burbujear vigorosamente, vigila el fuego. Cocinar a fuego medio en lugar de alto ayudará a evitar que el almíbar se queme.
Step 4
Tan pronto como el almíbar empiece a hervir, vuelve a añadir todas las almendras tostadas a la sartén. Usando una espátula o cuchara de madera, mezcla las almendras continuamente para asegurarte de que queden cubiertas uniformemente con el almíbar. Sigue removiendo para evitar que se aglomeren.
Step 5
¡Este es un paso clave! Continúa cocinando y removiendo las almendras en el almíbar hasta que este se reduzca y cubra las almendras maravillosamente. Sabrás que está listo cuando el almíbar se espese y se vuelva pegajoso, y las almendras comiencen a adherirse ligeramente entre sí. Sigue removiendo para asegurar una cocción y cobertura uniformes.
Step 6
Transfiere las almendras cubiertas de almíbar a un bol grande. Ahora, añade el azúcar moreno (20g). El azúcar moreno aportará otra capa de caramelización y un sabor más rico y profundo a tus almendras garrapiñadas.
Step 7
¡Actúa rápido una vez que hayas añadido el azúcar moreno! Mezcla rápidamente las almendras para cubrirlas con el azúcar antes de que se disuelva por completo y se convierta en un almíbar. El objetivo es obtener una ligera capa de cristales de azúcar en cada almendra, en lugar de un almíbar completamente derretido. Mezclar en exceso puede hacer que se vuelvan demasiado pegajosas.
Step 8
Forra una bandeja para hornear o una bandeja con papel de hornear. Extiende las almendras recubiertas de azúcar de manera uniforme sobre la superficie preparada. Deja que se enfríen y se asienten sin moverlas. Para acelerar el proceso y asegurar la máxima crocancia, las coloqué frente a un ventilador a baja velocidad durante unos minutos. Esto ayuda a que las almendras se endurezcan rápidamente.
Step 9
Una vez que el almíbar y el recubrimiento de azúcar se hayan endurecido por completo, ¡tus deliciosas almendras garrapiñadas con miel estarán listas! Deja que se enfríen completamente antes de romperlas o cortarlas en trozos pequeños. ¡Se disfrutan mejor recién hechas!