Kimchi de Cebolleta Agridulce y Picante
Receta de Kimchi de Cebolleta para Abrir el Apetito
Elaborado con cebolletas frescas o cebolletas tiernas, este Kimchi de Cebolleta posee un sabor profundo y sabroso que lo convierte en el acompañamiento perfecto para el arroz. Combina maravillosamente con comidas ricas como la panceta de cerdo a la parrilla, ofreciendo un sabor que no olvidarás. ¡Prueba a preparar este delicioso Kimchi de Cebolleta con esta fácil receta!
Ingredientes Principales
- 2 manojos de Cebolleta o Cebolleta tierna (limpias)
- 1 Cebolla mediana
- 4 Chiles Rojos (ajustar al gusto)
Ingredientes del Aderezo
- 1/2 taza de Salsa de Anchoa o Pescado Pollack (aprox. 100g)
- 4 cucharadas de Jarabe de Maíz o Extracto de Ciruela
- 4 cucharadas de Copos de Chile Gruesos
- 2 cucharadas de Copos de Chile Finos
- 2 cucharadas de Harina
- 1 cucharada de Jengibre Rallado
- 2 cucharadas de Ajo Picado
- 1/2 taza de Salsa de Anchoa o Pescado Pollack (aprox. 100g)
- 4 cucharadas de Jarabe de Maíz o Extracto de Ciruela
- 4 cucharadas de Copos de Chile Gruesos
- 2 cucharadas de Copos de Chile Finos
- 2 cucharadas de Harina
- 1 cucharada de Jengibre Rallado
- 2 cucharadas de Ajo Picado
Instrucciones de preparación
Step 1
Primero, limpia las cebolletas o cebolletas tiernas retirando las hojas amarillas o marchitas. Lávalas a fondo bajo agua corriente, asegurándote de eliminar toda la suciedad e impurezas. Después de lavarlas, déjalas escurrir completamente en un colador. Es importante eliminar el exceso de agua, ya que puede hacer que el kimchi se ablande.
Step 2
Vamos a preparar una pasta de harina para añadir profundidad y textura a tu kimchi de cebolleta. En un bol, combina 2 cucharadas de harina con aproximadamente 1/2 taza de agua (usando una taza de papel estándar coreana). Bate hasta que esté suave, luego transfiérelo a una olla. Cocina a fuego bajo, revolviendo constantemente, hasta que espese formando una pasta. Deja que se enfríe completamente. (Alternativamente, puedes simplemente mezclar la harina con agua fría hasta que esté suave y usarla directamente sin cocinar).
Step 3
Pela y lava la cebolla y el jengibre. Usando una licuadora o rallador, tritura finamente la cebolla y el jengibre. Triturarlos mejorará significativamente la profundidad del sabor y creará un aderezo más suave.
Step 4
Lava los chiles rojos, retira los tallos y las semillas antes de cortarlos. Colócalos en una licuadora y tritura hasta que queden finos. Estos chiles añadirán picante y un color vibrante. Si prefieres más picante, puedes añadir 1-2 chiles verdes coreanos (cheongyang).
Step 5
Ahora es el momento de preparar el delicioso aderezo para el kimchi. En un bol grande, combina la salsa de pescado (anchoa o pollack), el jarabe de maíz (o extracto de ciruela), los copos de chile gruesos, los copos de chile finos, la mezcla de cebolla y jengibre triturados, y el ajo picado. Añade la pasta de harina enfriada (del paso 1) y mezcla todo a fondo hasta que esté bien combinado y suave. Asegúrate de que no queden grumos y que los sabores estén distribuidos uniformemente.
Step 6
Coloca las cebolletas o cebolletas tiernas preparadas de forma ordenada en un bol de acero inoxidable o un recipiente ancho. Es mejor usar recipientes de vidrio, plástico o acero inoxidable para almacenar el kimchi y mantener su frescura por más tiempo, en lugar de recipientes metálicos.
Step 7
Vierte la mezcla del aderezo (del paso 4) de manera uniforme sobre las cebolletas en el bol. Asegúrate de que el aderezo cubra bien las cebolletas.
Step 8
Es crucial mezclar suavemente para evitar magullar o aplastar las cebolletas. Levanta con cuidado las cebolletas desde abajo y voltéalas hacia arriba, mezclando suavemente para asegurar que el aderezo se distribuya uniformemente. Manipula las cebolletas con cuidado, como si las estuvieras tratando con delicadeza.
Step 9
Deja que el kimchi de cebolleta fermente a temperatura ambiente durante un día. Este proceso permite que los sabores se mezclen y desarrollen un gusto más profundo. Después de un día, puedes disfrutarlo inmediatamente o guardarlo en el refrigerador para mantenerlo fresco y delicioso. Almacenado correctamente en el refrigerador, puede mantenerse fresco durante aproximadamente 2-3 semanas.